sábado, 13 de marzo de 2010

Bailarina

Para Jenny, Bailarina de ilusiones.

Ella pidió un relato... una pequeña historia que la hiciera feliz. Entonces la encuentro bailando, y se me ocurre decirle:"el silencio de mis manos acompaña tu música que bailas en solitario". Pero no lo digo, lo callo. Recuerdo su petición. Y recuerdo las canciones que a ella le gustan; las evoco y las canto. Mientras escribo en el cuaderno algunas ideas, palabras sueltas para escribir alguna historia, recuerdo la historia de Vila Matas sobre el hombre que escribía su novela en el viento. Es algo parecido a bailar sin música, escribir los poemas sobre la arena, saltar sólo por el gusto de saltar y cerrar los ojos y andar descalzos escuchando una melodía que sólo se puede escuchar en el interior. Eso es lo que ella está haciendo. Lo que me hizo prometer que le escribiera, y con un final feliz. Porque me dijo que era una joven que bailaba sola una canción que recordaba en silencio inventandose un momento o una historia que la hiciera feliz. Por eso debo escribir un final feliz; a diferencia de lo que escribo porque siempre escribo cosas sin finales felices; si es que acaso escribo los finales. Es por eso que escribo esta historia, porque esta historia termina con un poema; una pequeña canción escrita en un breve lapso de tiempo que recuerda a una bailarina que danza en silencio, contemplando tardes con colores alegres.


Buscame en la sonrisa
-bailarina loca que regala los besos
al viento-
y baila descalza sobre los
sueños que te entregan
los pájaros
en tardes alegres
de colores

Y si sonríes
como lo haces siempre
la música inundará todo el silencio,
ese que hace danzar a los alegres
en tardes con canciones
desconocidas del alma.

No hay comentarios.: